sábado, 26 de enero de 2013

El comienzo.

Es un poco posero, pero sólo para ustedes. A veces es bueno escribir, y sobretodo cuando se está solo, ya que da la ilusión de tener algo de compañía. Esto de hacer un blog cuando me viniera a Australia lo había pensado, pero no en serio. Lo empecé a considerar seriamente cuando vi todos los mensajes que me enviaban preguntándome por mi viaje. Pues bien, así me ahorro de repetir lo mismo  y me aseguro que todas las personas que realmente se interesan por mí van a poder saber novedades de mi nueva vida, mi aventura, y por supuesto, voy a poder mantener contacto sin ningún problema. Así que ya saben, esto es sólo para los que de verdad les intereso :)

Bueno, comienzo diciendo que el viaje fue latoso y bla bla bla, y que no dormí nada en el avión. Vi como tres películas y la huasa de yo, tenía miedo cuando habían turbulencias y también en el despegue. Ah, y de cuando en cuando miraba el recorrido del avión y en qué lugar se encontraba, y empezaba a pensar que si se caía moriría instantáneamente y nunca me encontrarían, pues el vuelo fue sobre el océano Pacífico las 17 horas de duración. En algo tenía que pensar, jajaja.


Llegué a Sydney, transbordo a Brisbane. En el aeropuerto me estaba esperando un señor de la UQ (Universidad de Queensland) y me llevó a mi depto temporal. Como muchos saben, llegué sola, ya que recién mañana domingo llega una de las chicas que vive aquí, así que he estado todo el tiempo sola. Por un lado bien, y por otro mal, porque no tengo a quien preguntarle cosas básicas de la ciudad, como transporte por ej. Pero en fin... ya sabrán las consecuencias de aquello. Como no dormí en el avión, no tuve jetlag y me adapté de inmediato al cambio de horario. Al otro día desperté temprano y me aventuré a recorrer, cerca obviamente, y fui a un mall cerca de acá. Todo bien, gracias a mi GPS no me perdí, recorrí, compré algunas cositas para el almuerzo y me vine en bus. Cuento corto, anduve tres horas perdida en el bus, me bajé y me subí a tres buses diferentes porque no sabía donde tenía que bajarme. Tuve la suerte de que los choferes eran tan amables que uno hasta detuvo el bus y sacó un librote en donde estaban los recorridos, y me dijo el bus que tenía que tomar para volver a mi casa. Bueno, al final después de muchas vueltas, llegué CHATA al depto, con toda la margarina que había comprado derretida. Después pasó otro percance pero lo solucioné porque soy bacán y eso es lo único que importa xD.


Estos días no he conocido mucho, porque he andado con la preocupación de encontrar una casa, que por fin hoy encontré! Me cambiaré el próximo domingo 3 de Febrero, la compartiré con tres niñas, dos chinas y una australiana, todas estudian en UQ. La casa es pequeña, modesta para los estándares australianos (no tiene grandes lujos) pero tengo todo lo que necesito (de hecho tengo más cosas de las que tenía en Valdivia, jajaj), y mi pieza es grande y acogedora. Espero que todo salga bien.


Mis primeras impresiones de Brisbane es...wow! La ciudad es linda, limpia y ordenada. El transporte es de lujo, buses con aire acondicionado, asientos acolchados, con sistemas alternativos de pago, y lo mejor, con una funcionalidad ideal. Con eso me refiero a que, por ej, en cada paradero (que hay muchos) están los números de los buses que pasan por ahí, los horarios en los que pasan (que es exacto todas las veces) y sus recorridos. Hasta hay una aplicación para el celular que te planea el viaje, uno pone donde está y a dónde quiere llegar, la hora, y te salen todas las opciones: Camine 100 m a tal paradero, tome tal bus, bájese en tal parte. O sea, igualito al Transantiago! 

Lo otro que me llamó mucho la atención, y que realmente se nota, es la amabilidad de la gente. Todos, pero todos, están dispuestos a ayudarte, te saludan y se despiden con una sonrisa. Yo he tenido que pedir mucha ayuda, por eso lo he comprobado. La Universidad es preciosa, es grande y parece una ciudad. Dentro del campus hay farmacia, patios de comida, tiendas de ropa, restaurantes, teatro, banco, oficina de correo, y hasta un pub! Obviamente tiene canchas de tennis, rugby, piscina, etc. Gracias a una chilena conocida pude ver en qué edificio tendré clases el martes (ya que el lunes es feriado por ser el Australia day), así que espero no andar tan perdida.  

En general he estado súper bien, perdida totalmente, como supuse que iba a ser, pero he podido salir bien de todos los problemillas que han surgido, y eso gracias a lo amable que son las personas acá, porque o sino yo creo que me habría puesto a llorar con la desesperación de no saber qué hacer. No he tenido problemas con el idioma, creí que me costaría entender el acento australiano pero no, y ellos me entienden bien a mí. A los que me cuesta entenderles es a los chinos (o asiáticos, lo mismo), sobretodo a las personas mayores.... hablan horrible! En fin...


La otra semana, cuando ya esté ubicada en mi casa definitiva, espero acomodarme mejor y poder conocer más la ciudad. Hay muchos lugares turísticos y lugares que debo visitar sí o sí, pero tendré tiempo para eso así que no me apuro. Fotos tengo repocas, porque como dije antes, todos estos días me he dedicado a conocer mi entorno y a buscar casas.Ah!!! El clima!!! Horrible... en verano acá llueve y en invierno hay sol. Pero es un clima tropical y llueve con calor. Ando todo el día con la cara brillante, y cansada a morir porque he caminado mucho buscando casa y las calles son como colinas, pero bien empinadas. Mucho calor y mucha humedad, súper incómodo. Pero dicen que ya falta poco, porque en invierno el clima se pone agradable. Espero que sea así. Animalitos extraños se ven en la calle, como pavos muy grandes, pájaros que roban la comida, lagartijas enormes (me acordé de la Kathy cuando vi una, ajaja), cucarachas, y esos bichos feos que parecen ardillas-ratones, los possum. 


Y eso sería, cuando tenga más que contar escribo de nuevo :D



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